‘Aliados’ es un gran guion con una producción mediana

Un espía canadiense (Brad Pitt) es enviado a Casablanca  durante la Segunda Guerra Mundial para reunirse con una aliada francesa (Marion Cotillard) y terminar con una gran amenaza. Esa es la premisa de esta nueva cinta de espías, pero conforme avanza la trama, va migrando y las intrigas se van haciendo más profundas y preocupantes.

Es ahí donde radica la mayor virtud de la nueva cinta de Robert Zemeckis, quien entrega un guion sólido e interesante. Sí, es una historia de amor, pero no es el clásico romance que hemos visto desarrollarse durante esta época. La tensión es lo que sostiene a la cinta, que tiene otros problemas que no se pueden ignorar. Los giros de tuerca son interesantes -siempre y cuando no hayan visto los avances- y los mantendrán interesados en una narrativa que, en manos de un escritor menos diestro, pudiera caer en lo aburrido.

La química entre los protagonistas también ayuda a que los valores de producción -bastante medianos- pasen a segundo término. Otro pecado es el mal uso de grandes actores en roles secundarios -Lizzy Caplan, particularmente- que apenas y tienen tiempo en pantalla. Y sí, sabemos que es una historia de amor, por lo que el centro son sus dos protagonistas, pero sí podría existir espacio para mejorar aquellas personas que los rodean.

Veredicto

3 estrellas

A pesar de tener pinta de ser una gran cinta de Hollywood, Aliados cuenta con una producción mediocre que es difícil de ignorar -¿qué pasa con ese CGI-. Sin embargo, la película se salva gracias a buenas actuaciones por parte de sus protagonistas, además de contar con un guion interesante repleto de tensión. Es una opción entretenida y es una lástima que probablemente se pierda entre el mar de cintas oscariles que se van a estrenar en las próximas semanas.