Ana: la serie inspirada en la vida de Ana de la Reguera

Ana es la nueva serie “semiautobiográfica” producida, protagonizada e inspirada en la vida de Ana de la Reguera, donde la actriz se interpreta a sí misma en una comedia que narra las inquietudes y frustración profesional de una actriz, otrora famosa por su pasado como protagonista de telenovelas, y que ahora lucha por entrar a Hollywood.

Estrenada esta semana como exclusiva de Amazon Prime (aunque puede verse también en Comedy Central), la serie ha dado mucho de qué hablar. ¿Vale la pena verla?, Aquí te lo decimos.

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Lo bueno, lo malo y lo feo de la serie de Ana de la Reguera

LO BUENO

Las referencias meta

Ana es la protagonista de su propia serie y se interpreta a sí misma, pero los personajes con los que interactúa claramente están basados en personas de la vida real, como su mánager (Eduardo España), uno de sus amantes (Andrés Almeida) alto ejecutivo de una empresa que claramente es Televisa (aunque no la mencionan por su nombre), o la influencer que le gana un papel para una película.

Los cameos y referencias de su familia

Uno de los personajes más chistosos y destacables de la serie es la mamá de Ana (fabulosa interpretación de Tina Romero), una mujer obsesionada por convertir a su hija en una estrella de Hollywood y que está basada -en apariencia y actitud- en la verdadera madre de Ana de la Reguera. En general, todos los cameos de su familia son de lo mejor de la serie, como por ejemplo su hermana, Ali Gua Gua, otrora guitarrista de Las Ultrasónicas y que efectivamente es la hermana de Ana. O su papá, Don Augusto Gardoqui, quien se interpreta a sí mismo en la serie.

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Carlos Carrera como director

No sin excesos de estilo que buscan empatar a la serie con una estética “juvenil” y de “redes sociales”, la dirección de Carlos Carrera (La Mujer de Benjamín, De La Infancia, Sin Remitente) resulta adecuada, sobre todo en la dirección de actores.

LO MALO

Es una mala copia de muchas cosas…

…y de muchas cosas que son fácilmente identificables. De entrada, el formato de la serie se parece demasiado a Louie, la exitosa serie de Louis C.K. donde interpretaba a un comediante de stand up (o sea, se interpretaba a él, o una versión de él). También la serie nos remite a Fleabag (la premiada serie de Phoebe Waller-Bridge), y aunque Ana no rompe la cuarta pared, si rompe la realidad, por lo que de repente se encuentra bailando con toda la gente que pasa en el Parque España de la Condesa (igual que en 500 Days of Summer). Incluso ya en el descaro total, hay una escena idéntica que pertenece a La La Land.

Los malditos musicales

Por alguna razón, en todos los capítulos (que afortunadamente duran menos de media hora) hay momentos donde Ana canta canciones, o baila. Son escenas que no agregan absolutamente nada a la trama y si recalcan, innecesariamente, el carácter fantasioso de la serie.

Temas metidos con calzador

La serie parece una larga lista de temas metidos para generar polémica y no por una auténtica voluntad de decir algo al respecto: sexo entre mujeres, squirting, bondage, relaciones abiertas, drogas, maternidad… todo en apenas diez capítulos de 25 minutos.

LO FEO

Que el morbo nos mueve a seguir viendo: ¿qué nueva locura se le ocurrirá a la mamá?, ¿Ali Gua Gua va a echarse una rola?, ¿qué ejecutivo de Televisa es el personaje del amante de Ana?, ¿quién será el manager con silla de ruedas?