Ben.Hur: Un emocionante remake de un clásico del cine

En la era de los remakes es difícil encontrar uno que satisfaga las expectativas de una audiencia contemporánea al mismo tiempo que respeta la esencia del material de original. La nueva versión de Ben-Hur era una de esas historias atrapadas en la sombra de un clásico que cambió el rumbo del cine. Los nervios se elevaron cuando se dio a conocer que la dirección iba a correr a cargo de Timur Bekmambetov, quien a pesar de realizar grandes escenas de acción -como en Wanted-, no era conocido por traer buenas películas.

Así llegó esta cinta que cuenta la historia de un aristócrata que es acusado de un crimen que no cometió y apresado por los romanos. Motivado por su sed de venganza, retará a su hermano para poder recuperar su libertad y buscar a su familia.

Y sí, esta no es la cinta sesentera de Charlton Heston, pero tampoco trata de serlo y es ahí donde radica su éxito. En esta versión la acción toma un papel principal, pero ocurre con un cimiento que viene de un contexto en donde los personajes te importan gracias a buenas –aunque no excelsas- actuaciones del ensamble liderado por Jack Huston y Toby Kebell. En esencia es una historia de redención, pero es una bien realizada y muy entretenida.

Visualmente es espectacular, en particular la famosa escena de la carrera de carrozas. Tardaron meses en rodarla, pero no fue en vano porque el resultado es verdaderamente vistoso. Podemos decir lo mismo de varias escenas de acción que mantienen la tensión y te tienen al borde de la silla.

Veredicto

3.5 estrellas

Ben-Hur es un remake que logra cobrar vida por sí mismo ayudado de un guion redondo, actuaciones decentes, pero sobre todo, grandes escenas de acción. Es de lo mejor que vimos en este verano de blockbusters decepcionantes.