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Dos Veces Tú: lo bueno, lo malo y lo feo

Por: Alejandro Alemán 25 Feb 2020

Una película de cine mexicano arriesgada, que se filmó en la ciudad pero lejos de los lugares comunes. Eso es Dos Veces Tú, nuestra apuesta de la semana

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La segunda película del director mexicano Salomón Askenazi, Dos Veces Tú, es una cinta inclasificable: es un thriller, una historia de amor, un relato fantástico. Es, también, una osadía si se toma en cuenta que el cine mexicano pareciera que no sabe hacer otra cosa que no sean comedias románticas.

La trama es sencilla: en medio de una boda y luego de un exceso de copas, un par de amigas decide cambiar de parejas. El juego sigue al salir de la fiesta, cuando deciden que es buena idea ponerse a jugar carreritas en las calles de CDMX. Lo que sigue es absolutamente inesperado.

¿Vale la pena ver esta película?, ¿funciona? Aquí te lo decimos.

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Dos Veces Tú: lo bueno, lo malo y lo feo

LO BUENO

Es una cinta arriesgada

Siempre le reclamamos al cine nacional su falta de coraje e inventiva; bueno, pues aquí tenemos una película que para el minuto treinta se despliega como dos cintas que van en paralelo y a destiempo. Queda en el espectador la tarea de armar la historia y darle sentido a lo que está pasando en la pantalla

Las protagonistas

Dos amigas auténticamente inseparables, que tendrán que lidiar con la pérdida, la tristeza y la melancolía. Con sus actuaciones, Melissa Barrera y Anahí Dávila inyectan personalidad y suspenso a esta cinta.

No es la clásica cinta mexicana

Filmada en las calles de CDMX, pero no en las locaciones de siempre (Condesa, Roma, Santa Fe). Con caras nuevas en los protagónicos e incluso un par de secuencias que podrían calificarse como de acción. No es pues, la clásica cinta mexicana.

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LO MALO

No todos los trucos funcionan

En algún punto, la película pareciera dividirse en dos películas que van en dirección opuesta pero que se empalman. Un juego narrativo interesante, pero que francamente no siempre funciona.

Es complicada de seguir

Ésta es de esas películas que le exigen mucho al público: queda en nosotros armar el rompecabezas que se nos pone enfrente, y lo cierto es que no será fácil, al menos no al principio.

LO FEO

Lo feo es que cintas como ésta, que arriesgan y presentan nuevas propuestas, no suelen durar mucho en cartelera.