El nuevo esquema no solo moderniza la recolección: también apunta a una ciudad más ordenada, sustentable y comprometida con el futuro.
La CDMX inicia una transformación histórica en la forma de manejar sus residuos. A partir del 1 de enero de 2026, entrará en vigor un nuevo esquema obligatorio de separación que redefine qué debemos hacer con lo que generamos en casa y, sobre todo, cuándo sacarlo para su recolección. Aquí te contamos los detalles sobre este nuevo método de recolección de basura:
Foto: SEDEMA
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Este cambio forma parte de la campaña “Transforma tu ciudad, cada residuo en su lugar”, considerada la iniciativa ambiental más ambiciosa que ha lanzado la capital. Su objetivo es simple pero crucial: evitar que 8,500 toneladas de desechos diarios terminen mezcladas, desaprovechadas o contaminando barrancas, ríos y coladeras.
Para que la separación sí funcione desde origen, la ciudad estableció días específicos para cada tipo de residuo:
Residuos orgánicos:
Residuos inorgánicos reciclables:
Residuos inorgánicos no reciclables:
La idea es clara: que cada tipo de residuo tenga un manejo adecuado, desde que sale de casa hasta que llega a las plantas de tratamiento, evitando mezclas y permitiendo que se reintegren a la economía circular como composta o materia prima.
Las autoridades ambientales señalan que este ajuste representa un “antes y después” comparable a políticas como los espacios libres de humo o el uso del cinturón de seguridad.
Con el apoyo de la SEDEMA, la Secretaría de Obras, la Agencia de Gestión Integral de Residuos (AGIR) y un equipo de educadores ambientales, el objetivo es lograr que al menos el 50% de los residuos de la ciudad se separen correctamente antes de 2030.
Actualmente, en CDMX:
Separarlos permite:
No olvides: el nuevo sistema de recolección de basura en CDMX iniciará a partir de 1 de enero de 2026.
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