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Falleció Vicente Rojo: emblema de la Ruptura y lo abstracto
El diseñador gráfico, pintor y escultor Vicente Rojo, uno de los artistas más importantes en México, falleció la noche de este miércoles a los 89 años de edad.
El arte está de luto ante la muerte del diseñador, pintor y escultor Vicente Rojo, quien falleció la noche de este miércoles 17 de marzo, a un par de días después de haber celebrado sus 89 años de edad. Su esposa Bárbara Jacobs confirmó el deceso del artista; así como el ministro José Ramón Cossío.
El artista festejaba su cumpleaños lleno de homenajes: “Todo lo que he hecho ha sido ayudarme por la vida, ayudarme por mi vida, por mi manera de vivir. Supongo que ya a mi edad la muerte puede andar por ahí, pero no me preocupa. Cuando llegue, llegará.” sostuvo el artista en un video difundido por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
El antiguo Hotel de Cortés se transformó en el Museo Kaluz
Vicente Rojo: un legado abstracto, gráfico y escultórico
Nacido en 1932 en Barcelona, Vicente Rojo llegó a México con apenas 17 años de edad, para concluir sus estudios de pintura y tipografías y para vivir con su padre, el cual residía es nuestro país como refugiado político desde el fin de la Guerra Civil Española.
El artista que obtuvo la nacionalidad mexicana, poco a poco se consolidó y formó parte de la primera generación de artistas abstractos nacionales abiertamente confrontados con la tradición de la Escuela Mexicana de Pintura. A esta llamada Generación de la Ruptura pertenecieron también artistas como Rufino Tamayo, Fernando García Ponce, Manuel Felguérez y Lilia Carrillo.
Además sin dejar de lado la pintura y la escultura se dedicó a expandir su obra como diseñador gráfico. Contribuyó al fortalecimiento de la industria editorial mexicana y fue fundador de suplementos culturales y casas editoras. También fue autor de portadas de libros como “Cien años de soledad”, “Las batallas en el desierto” y “Bajo el volcán”; asimismo diseñó periódicos y revistas, dibujos, esculturas, carteles, pinturas y grabados.
Entre las últimas creaciones que realizó destacan proyectos de obra pública y privada, entre ellos el vitral iluminado del edificio del Monte de Piedad, el cual le significó un desafío, porque no había trabajado con anterioridad la técnica vitralística. También, el monumental jardín urbano ubicado en el Antiguo Hostal de Santo Tomás de Villanueva, posteriormente el remodelado Museo Kaluz; y el Memorial de Octavio Paz, que consiste en dos esculturas ubicadas en el Antiguo Colegio de San Ildefonso.
Algunos de los reconocimientos que obtuvo son el Premio Nacional de Ciencias y Artes (México,1991), el Premio México de Diseño (1991) y la Medalla al Mérito en las Bellas Artes (España, 1993). En 1992, la Asociación Internacional Icograda lo distinguió con el Premio de Excelencia en Diseño Gráfico. Al año siguiente fue designado Creador Emérito por el Sistema Nacional de Creadores de Arte, y en 1994, miembro de El Colegio Nacional. En 1998, la UNAM le confirió el doctorado honoris causa.
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