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Muere Roscoe, el famoso bulldog de Lewis Hamilton y estrella del paddock
Murió Roscoe, el bulldog inglés de Lewis Hamilton. Un compañero fiel que conquistó a fans y pilotos en la Fórmula 1.
Hoy el mundo de la Formula 1 está de luto, y no precisamente por un piloto, sino por uno de los compañeros más entrañables que tuvo el paddock: Roscoe Hamilton, el inseparable perrito de Lewis Hamilton. Más que una mascota, Roscoe se convirtió en toda una estrella querida por fans, medios y equipos, robando miradas y corazones en cada carrera. Hoy toca despedirlo, recordando la huella tan especial que dejó dentro y fuera de la pista.
En los últimos días muchos nos enteramos, gracias a las historias de Instagram, que Roscoe, el inseparable compañero de Lewis Hamilton, estaba hospitalizado y pasando por momentos muy críticos. El piloto incluso pidió a sus seguidores que lo mantuviéramos en nuestros pensamientos y oraciones, lo que encendió la preocupación en todo el paddock y entre los fans.
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Este video te puede interesarHace apenas tres días, Lewis compartió un post donde quiso mantenernos al tanto:
“Quiero mantenerlos actualizados. Roscoe contrajo neumonía de nuevo y estaba luchando por respirar. Fue ingresado en el hospital y sedado para calmarlo mientras le hacían controles y durante el proceso su corazón se detuvo. Lograron recuperar un latido y ahora está en coma. No sabemos si va a despertar de esto. Mañana trataremos de despertarlo. Estoy a su lado y quiero agradeceros a todos por vuestras oraciones y apoyo.”
La noticia corrió rápido y no tardaron en sumarse medios, pilotos, equipos, cuentas de mascotas y, por supuesto, miles de fans enviando palabras de aliento a la famosa dupla. Pero lamentablemente, esta madrugada el heptacampeón compartió en sus redes sociales que tuvo que tomar unas de las decisiones más difíciles de su vida.
“Después de cuatro días de soporte vital, luchando con cada poco de fuerza que tenía, tuve que tomar la decisión más difícil de mi vida y despedirme de Roscoe. Nunca dejó de luchar, hasta el final. Me siento tan agradecida y honrada de haber compartido mi vida con un alma tan hermosa, un ángel y un verdadero amigo. Traer a Roscoe a mi vida fue la mejor decisión que he tomado, y siempre apreciaré los recuerdos que hemos creado juntos. Murió el domingo por la tarde, 28 de septiembre en mis brazos.”
Si alguna vez han tenido una mascota, saben el vacío enorme que deja cuando se va. Y justo por eso podemos entender el dolor que hoy está viviendo Lewis Hamilton. Su inseparable compañero, Roscoe, ya no está. Ese bulldog que vimos acompañarlo durante 12 años en los grandes premios, en sus victorias y derrotas, prácticamente en cada etapa de su vida. Para muchos era “el perro de Hamilton”, pero para él era mucho más: era su familia. Porque las mascotas son eso.
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Sin duda, esta es una de las pérdidas más duras que enfrenta el paddock, porque Roscoe no solo fue el fiel compañero de Lewis, también logró ganarse el cariño de fans, pilotos, ingenieros, mecánicos, y hasta de Ángela, la preparadora física de Hamilton. Era más que una mascota; fue parte de la gran familia de la Fórmula 1 y una de las figuras más queridas en este deporte.
Roscoe nos dejó momentos inolvidables que siempre recordaremos con una sonrisa. Desde aquella vez que Checo casi lo lleva, sus apariciones en juntas de equipo o en garage. Su encuentro con Leo Leclerc, hasta llegar a la pantalla grande en la película de F1. Cada instante suyo fue especial y se convirtió en un pedacito de historia dentro del automovilismo.
Hoy solo queda decir: descansa en paz, Roscoe. Tal como lo hace Lewis, también nosotros te llevaremos siempre en nuestros corazones. Gracias por todo lo que le regalaste a la Fórmula 1 y por acompañar a uno de los pilotos más grandes de la parrilla. Te vamos a extrañar, pero sabemos que ahora estás en un mejor lugar. Roscoe forever.
