Chanfle y Recontrachanfle, el nuevo centro de entretenimiento de Satélite alberga el restaurante de la vecindad de El Chavo del Ocho.
Dentro de Plaza Satélite abrió un lugar por demás entrañable para generaciones enteras de televidentes mexicanos (y de muchos otros países de Latinoamérica): Chanfle y Recontrachanfle, centro de entretenimiento dedicado a los personajes creados por el desaparecido comediante Roberto Gómez Bolaños, que alberga un restaurante temático: Fonda Chespirito.
Tienda de souvenirs, área de videojuegos y un espacio donde se recreó la vecindad más famosa de México reciben a los visitantes, quienes antes de pasar a la mesa para llenar la barriga pueden tomarse una foto en una recreación del famoso barril donde solía esconderse el Chavo del Ocho cuando lo regañaban.
Una pared adornada con fotografías emblemáticas de Chespirito y sus famosos personajes forman parte de la decoración del establecimiento, que ofrece un menú de comida mexicana con el toque de la casa, con entradas como quesadillas de esquites o el Quesito Santo, el cual viene a ser un queso fundido recubierto de una costra crujiente de hoja santa y chorizo, sin faltar las tortillas de harina para acompañarlo.
Una deliciosa mezcla de pepitas, cacahuates y ajonjolí, con la que bañan una chuleta de cerdo sazonada con hierbas de olor y calabaza asada, conforma el mole Doña Florinda, uno de los muchos platillos que también pueden degustarse en este divertido restaurante “sateluco”, donde no puede faltar la torta de jamón, acompañada con un vaso en forma de barril lleno de agua de limón, aunque de un color que la hace parecer de jamaica y un sabor, en realidad, de tamarindo.
La coctelería de Fonda Chespirito cuenta con creaciones del mixólogo José Luis León (el genio detrás de la barra de Limantour), preparadas con o sin alcohol, además de la cerveza Ron Damón, una aromática pale ale concebida para quitar la sed “de la mala”.