La Chinampa no es un restaurante, es la auténtica taquería con tacos, tortas, costras, gringas y cráteres que puedes saborear en sus 5 sucursales en la CDMX
La popularidad del los tacos al pastor provoca un conformismo en muchos lugares que poco se preocupan del entorno donde los despachan. Y aunque suene evidente no es asunto menor: más allá del sabor del taco, existe una enorme diferencia cuando uno los come en un lugar limpio, con servicio similar al de un restaurante y que los fines de semana funciona hasta entrada la madrugada. De ahí el éxito de La Chinampa.
Porque, ah, como cambia la percepción de un taco al pastor servido en un plato que no sea de plástico, luego que un valet parking recibe los automóviles de la clientela, y una persona que lleva a tu mesa más limones cuando los solicitas, por no hablar de su área infantil, que hasta puede contratarse para hacer fiestas, con animadores, niñeras y, por supuesto, la comida y bebida incluidas, como en el caso de las sucursales que operan en la colonia Del Valle, tanto en la calle de Amores como en Concepción Beistegui.. (También cuentan con servicio a domicilio y parrilladas para eventos.)
La carne preparada en el trompo del lugar puede emplearse a su vez en tortas, pan pita, gringas y cráteres (tostadas gratinadas), que comparten las opciones de la carta con alambres de diversas opciones de carne -bistec, arrachera, sirloin, rib eye, new york, filete-, sopes, quesadillas, jugo de carne, sopa de tortilla y ensaladas, que debe haber alguien que llegue a pedirlas.
Vino con tacos una mezcla única
Para los taqueros de gusto sibarita, que también debe haberlos, en La Chinampa encontrarán vino por copeo aparte de las reglamentarias aguas frescas, cervezas y hasta malteadas, que no sólo la piña que remata la preparación del taco es lo único dulce.
A taquear se ha dicho
De lunes a miércoles a partir de las 18:00, los tacos al pastor se despachan al 2x1.