La floreciente zona de Reforma se engalana con los atractivos de la cocina tradicional española.
Lejos de arredrarse por la Torre Mayor y demás rascacielos que rodean al hotel Marquis Reforma, este lugar también se alistó para el florecimiento de Paseo de la Reforma con la apertura, en su mezzanine, de La Cuchara de San Sebastián, restaurante y bar de tapas consagrado a la sustanciosa gastronomía española.
Lo que al principio se pensó como una remodelación del restaurante La Jolla, terminó en la creación de un concepto totalmente nuevo, dirigido a los ejecutivos que ya frecuentan o empiezan a llegar entre semana a la zona, al tiempo de ofrecerse como una alternativa para los paseantes domingueros de este tramo de la emblemática vialidad citadina, colindante al bosque de Chapultepec. (Curiosamente, los sábados sólo opera para eventos privados.)
Las comidas de negocios pueden acompañarse con una botella de vino que le rinda los honores al pulpo a la gallega, el bacalao a la vizcaína o el arroz con mariscos, mientras que un platón con tapas diversas —fuet con higo y queso manchego, salmón ahumado con queso crema y alcaparras fritas, y el obligado jamón serrano— puede presidir la reunión después del horario de oficina, con un servicio cálido pero sin perder la formalidad que caracteriza a los restaurantes de este renovado tramo de Reforma.
Y como todo restaurante instalado dentro de un hotel, ofrece el atractivo adicional de los desayunos con los obligados chilaquiles y huevos al gusto, pero también bagels y huevos benedictinos.
Fuente: FB @LaCucharaDeSanSebastian