Su concepto originario de Guadalajara, donde en 2018 se le reconoció entre los mejores restaurantes latinoamericanos, también está presente en Roma y Polanco.
La Docena surgió en 2012, en la ciudad de Guadalajara (donde a la fecha opera dos sucursales), con una propuesta original de cocina de Nueva Orleans y Cajún, donde los mariscos resultan protagónicos, a los que terminaron sumándose diversos platillos “de tierra” para conformar una ecléctica oferta combinada con su coctelería y ambiente, de atractivos resultados.
A Ciudad de México llegaría tres años después, a la planta baja del edificio ubicado en la esquina de Álvaro Obregón y Frontera, en la colonia Roma, en un local de paredes de ladrillo y columnas de cemento, entre las que colocaron mesas de madera con manteles de estraza donde sirven almejas, ostiones y otras delicias marinas, que comparten la carta con cortes, hamburguesas, emparedados y hasta jamones serrano y jabugo, cuyas piernas cuelgan en un rincón del local. En 2018 sumaron otra sucursal capitalina, ahora en la esquina de Homero y Sudermman, Polanco.
Las conchas son su carta de presentación, y los encargados del lugar presumen ofrecer diversas variedades de ostiones y almejas vivas, resguardadas entre hielo molido como garantía de su frescura, los cuales despachan por docena (de ahí el nombre del negocio) o media docena, igual preparados al grill que estilo rockefeller, o ahumados con un toque de salsa tabasco, sin faltar sus ya representativos poboys: sándwiches estilo Lousiana, preparados con baguettes que pueden ir rellenos pescado, calamar, ostión, camarón o una mezcla de los dos últimos, acompañados de salsa tártara, tomate y lechuga. Otros platillos de mar son las tostadas de atún aleta azul y su aguachile tatemado.
Llama a su vez la atención su apartado de cortes wagyu, raza vacuna originaria de Japón que aquí surten desde el estado de Durango, caracterizada por la suavidad, marmoleo y gran calidad de su carne: preparan a la parrilla igual asado de tira que chuletón, servido con papas fritas y un huevo estrellado encima.
La matriz tapatía fue reconocida entre los mejores 50 restaurante de Latinoamérica en 2018, por la lista anualmente auspiciada por S. Pellegrino y Aqua Panna, ubicándola en la posición número 40, abajo de otros restaurantes mexicanos como Pujol (3), Quintonil (9), Sud 777 (14) y Maximo Bistrot (20); el también tapatío Alcalde (31), y arriba de Rosetta (41).