Panuchos, tlacoyos de requesón y demás antojitos mexicanos, acompañados de un curado en el estacionamiento del Centro Comercial Santa Fe.
Las indicaciones para ubicar La Guadaña resultan esenciales: se encuentra dentro del tercer nivel del estacionamiento techado del Centro Comercial Santa Fe, señalado con color rojo, a la altura del Palacio de Hierro (abajo, pues), por lo que se puede dejar el automóvil prácticamente a la entrada del único sitio de la plaza comercial donde pueden comerse panuchos, tlacoyos y demás antojitos con un “pulmón” del día.
Pensado originalmente para atender las necesidades alimenticias y bebedoras de la población laboral de la plaza comercial, a precios módicos (con poco más de cien pesos, uno ya la arma), se convirtió en una concepto único por lo que ofrece en la zona: pulques —curados, en sentido estricto— de diversos sabores que cambian continuamente, como mango y horchata, los cuales despachan en pocillos de peltre de un cuarto, medio y litro entero.
La carta es extensa en sus apartado de entradas, antojitos y botanas abarcan sopes de tuétano, cochinita o camarón; quesadillas, tacos, tlacoyos, tlayudas, tortas y gorditas, además de nachos, y alitas. No faltan los molcajetes, los cuales pueden ser de arrachera, cecina o carnitas, ni platos fuertes como pescado a la talla, milanesas, tampiqueña y arrachera a la plancha. Para todos los gustos, o casi.
Entre semana suelen ofrecer los tragos al 2x1 (son días laborables, les recordamos), mientras que de jueves a sábado por la noche hay DJ y karaoke, ahí sí, para mandar al demonio la chamba.
Fotos: FB @LaGuadanaSantaFe