Fue cosa de tiempo para que La Naval agregara un área de restaurante a su tienda de vinos y ultramarinos, como la que opera en su sucursal de Río Lerma, la primera en contar con ese doble atractivo.
Fue cosa de tiempo para que La Naval agregara un área de restaurante a su tienda de vinos y ultramarinos, como la que ya opera en su nueva sucursal de Río Lerma, la primera en contar con ese doble atractivo.
Fiel al espíritu del lugar, su oferta es de cocina española, tapas y bocatas, principalmente, aunque también tiene croquetas de
serrano, bacalao, fideua los viernes y paella los miércoles, sábados y domingos, los dos últimos días, también para llevar, como acostumbra ofrecerse en todas sus sucursales.
Entre semana suele ocupar las mesas gente que labora en los alrededores, aunque también puede tomarse algo después del trabajo sin extenderse, puesto que cierran a las 20:00. En los otros días es una buena alternativa para comer en el barrio sin prisas ni pendientes.
Entre sus bocatas (versión española de las tortas) se encuentra la española, con jamón serrano y queso manchego semicurado, o bien las de chorizo ibérico, salmón ahumado, bacalao y roast beef, servidos con papas a la francesa o chips de camote y betabel.
En cuanto a las tapas, tienen de morcilla de arroz con una mezcla de pimientos con berenjena caramelizada, que sirven calientes. Una comida en forma puede completarse con una crema catalana o una tarta de Santiago con helado de turrón, de postres.