Esta famosa fuente de sodas se ha convertido en un icono de la ciudad con más de setenta años de tradición.
Aunque su nombre indique lo contrario, Nevería Roxy no es una paletería ni nevería, es una fuente de sodas que se ha convertido en un ícono de la Ciudad de México aunque su historia se remonta en el Cine Roxy de Guadalajara, lugar donde Don Carlos Gallardo se inspiró en la nieve de limón blanca que comía cuando era niño en la Barca para comenzar a fabricar sus propias nieves artesanales que vendía en el portico del cine.
No fue sino hasta 1946 cuando abrió la primer Nevería Roxy en la Condesa, no con el concepto de paletería o nevería, apesar de su nombre, sino como fuente de sodas, lo que lo convierte en una experiencia más completa, lo que lo convierte en el sitio ideal para pasar tiempo con los amigos mientras disfrutan de unos conos de helado o sentarse a la barra a beber la clásica malteada en pareja en este lugar que emana vibras retro por donde se le vea.
Aqui podrás encontrar nieves de sabores regionales como chicozapote, guanabana, melón, zarzamora y maracuyá, además de las opciones tradicionales limón fresa y mango; helados de coco con Kahlúa, arroz con leche y chocolate amargo servidos en vasito o cono y si busca algo más elaborado puedes pedir un sundae de helado de vainilla con jarabe de chocolate artesanal y nuez picada servido en copa, un banana split, una espesa malteada para saciar el antojo o un helado flotante para refrescarte.
Un clásico que nunca pasará de moda.