Scotch Bar tiene un interior minimalista, en donde se despachan más de 40 marcas de whisky y el preferido es el cóctel Who's The Boss?.
El concepto y ambientación de Scotch Bar nos remonta al Chicago de la época de la Prohibición; incluso su ubicación tiene un aire "clandestino" al estar dentro de un estacionamiento, con luces "dimeadas" y desgastadas paredes de ladrillo, aunque luego el visitante descubre llamativos murales, incluido uno con la figura del legendario Frank Sinatra con un whisky en la mano y, al fondo, la emblemática Ciudad de los Vientos.
En sentido estricto, se trata del bar de Porter Polanco, restaurante especializado en cortes, lo cual permite también ingresar por sus instalaciones, para llegar a un espacioso salón (le caben 150 personas) al aire libre y domo retráctil para las inclemencias ambientales. Sus decorados son minimalistas, en tonalidades blancas y grises, mientras la barra exhibe decorados en mármol, donde despachan casi cuarenta marcas posicionadas de whisky.
No faltan los cócteles de la casa en Scotch Bar, una quincena, donde destaca el trago de la casa, llamado Scotish: mezcla de dos variedades de whisky con infusión de manzanilla y hojas herbales, si bien el cóctel más solicitado por la clientela es el Who´s The Boss?, donde mezclan tequila blanco, ginebra y whisky, acompañados de un cítrico de mango casero, jugo de piña y jarabe de la casa.
El bar dispone de una docena de creaciones propias para comer, que incluyen tacos de filete con tuétano, chicharrón de rib-eye y aguachile de pulpo.
De miércoles a sábado, a partir de las 21:00, un dj se encarga de la ambientación musical con diversos géneros que van desde los éxitos del momento a hits electrónicos, sin faltar clásicos ochenteros y noventeros.
Durante el resto de la semana la propia clientela puede programar la música, a través de sus propios dispositivos portátiles. Por su ubicación en el corazón de Polanquito, se ha convertido en un solicitado lugar para practicar el after office.