Yoshimi Restaurante japones en Hyatt Regency Mexico City

Años atrás, el Hyatt Regency era el hotel Nikko, en cuyo interior albergaba al restaurante Benkay, uno de los más prestigiados de comida japonesa tradicional en la ciudad de México. Luego que este hotel levantado sobre la calle de Campos Elíseos cambiara de dueños para adoptar su actual nombre el restaurante siguió sus pasos llamándose ahora Yoshimi, el cual busca mantener el nivel culinario de su antecesor. 

Variedades preparadas con pescados y mariscos

Entre las alternativas de su carta de alimentos, destaca la fuente de sahismi especial con un muestrario de casi una docena de variedades preparadas con pescados y mariscos, entre las que se encuentran atún, salmón, almeja, una variedad de camarón de agua dulce, callo de hacha, calamar, robalo, macarela y hueva de salmón. Una docena de variedades de sake están disponibles para acompañarlos.

Fondue oriental en tu mesa

Otro de sus platillos estrellas es el shabu shabu, suerte de fondue oriental para el que montan una parrilla de gas en la mesa del comensal, sobre la que colocan un recipiente con agua donde se preparan diversas verduras, hongos, fideos y condimentos, amén de láminas de rib eye a las que el propio comensal les dará el grado de cocción deseado. 

Al final queda un sustancioso caldo que puede tomarse si así se desea. El platillo está concebido para dos personas, acompañado con un entremés, arroz al vapor, sashimi y helado; también lo ofrecen como sukiyaki, donde se maneja una cocción previa en la propia grasa del rib eye, aparte de utilizar un caldo de soya de ligero toque dulzón. Y, si se desea, puede ordenarse con carne wagyu, una variedad de corte de refinado sabor y consistencia. 

Cerrar negocios con palillos

El sobrio ambiente y mobiliario del restaurante Yoshimi se presta para celebrar comidas de negocios de alto nivel, aunque dispone de una barra de sushi para algo más informal, así como mesas en una terraza interior con decorados zen, que le imprimen una relajada atmósfera, sobre todo por la noche gracias a su iluminación. (Texto Arturo Reyes Fragoso, fotos platillos Arturo Limón, y del lugar cortesía.)