Ánimo: Birriamen y otros caldos (como preparados por mamá)

Restaurante familiar en el que la especialidad son los caldos clásicos y fusión, como el Birriamen y otros caldos. También sirven taquitos de guisados y tortas ahogadas.  

Caldos Ánimo, en la Nápoles, es una de las más recientes apuestas culinarias del reconocido chef Antonio de Livier. Su concepto es “comida del diario”, como dice su creador, y con esto se refiere a: caldos, tacos y tortas y para beber, aguas frescas de sabores (algunos exóticos) o cerveza.  

“Nació de la idea de servir calditos, apapachos de mamá y abuelita”, dijo en entrevista con este medio de Livier, quien recuerda a su progenitora cocinando caldo norteño (de pollo con queso asadero, papa, rajas, jitomate, calabaza y acelgas) y carne en su jugo en el municipio de Caborca, Sonora, donde vivían.

Los caldos de Portales 

El también chef ejecutivo de La Frida, en Los Cabos, dice que, aunque no aprendió a cocinar estas recetas tradicionales en casa, lo hizo cuando vivió lejos de ésta en Estados Unidos.  

“Aprendí (a prepararlas) por memoria y por extrañar mucho. Me acordaba muy bien de los sabores y así empecé”.  

Birriamen y otros caldos que amarás en Caldos Ánimo

Además de caldos clásicos, el menú de Ánimo incluye al “Birriamen”, que es caldo de birria con carne y fideos chinos (ramen). Te recomendamos agregarle limón y la salsa más picosa (de chile de árbol con ajonjolí), se vale comerlo con palillos, tenedor, cuchara o hasta sorbiendo del mismo plato.  

“Hace años comencé a mezclar caldos y el Birriamen nació de combinar el de gallina pinta y carne en su jugo con fideos. Una vez hice una sopa de pasta y le agregué birria, así fue tomando forma este platillo”, narró de Livier respecto a la creación de uno de los preferidos del restaurante.  

Dónde comer birria en CDMX

Aquí te puedes sentir en confianza para comer de la forma que más se te antoje y tanto como quieras, pues el ambiente es relajado, casi familiar, con una mesa tipo tablón al centro y barras.  

“Siempre digo que aquí servimos a una familia muy numerosa”, dijo de Livier, mientras estaba sentado frente a un mural de fotos, en las que aparece divertido junto a sus seres queridos y compañeros de trabajo.  

No te vayas sin probar… 

“Ánimo” es una de las palabras preferidas de Livier, sin embargo, también hace referencia a las consecuencias de probar calditos, “que te dan pa’rriba” y, según el chef, es algo muy positivo.  

Otro motivo por el que esta palabra da nombre a este establecimiento es que “lo que pidas depende de tu ánimo y un platillo puede hacerte muy feliz”.  

Si no sabes qué ordenar, como en heladería, se vale pedir degustación de todos los caldos, que regularmente son cuatro (Birriamen, caldo norteño de queso, caldo sonorita de res y sopa cachanilla de camarón), además del consomé del día.  

Para acompañar hay taquitos de guisados (chicharrón prensado con quintoniles, pollo a la crema poblana con quelites, lengua en adobo y rajas con kale, entre otros). 

Recientemente también se sumaron al menú tres recetas de tortas ahogadas: la tradicional de carnitas con salsa picosa de chile de árbol, una de barbacoa norteña con birria y otra de costilla de res en su jugo.  

El chef ejecutivo dice que las preparaciones están inspiradas en estados de norte del país, en su niñez en Mexicali y en la influencia de su familia de Jalisco y Sonora.  

• ¿Dónde? Pensilvania 205, Nápoles || Río Elba 31, Cuauhtémoc.
• ¿Cuándo? lun. a dom. de 12:00 a 22:00.
• Cuenta promedio: $120