Poliamor: ¿Esta forma de amor existe en la CDMX?

“El amor no se mira, se siente”, decía el famoso poeta chileno Pablo Neruda; por eso no es de sorprender que el ser humano simplemente se deje llevar por este sentimiento y amplíe sus horizontes y su corazón para dar cabida a una, dos o más personas sin engañar a ninguna, esto es sencillamente el poliamor.

El poliamor se basa en la confianza y la sinceridad

¿O sea, cómo se puede amar a más de uno? Pues sí, y para que no te confundas esto no tiene nada que ver con los swingers.

El poliamor es amar a más de una persona sin que el deseo sexual sea la base del lazo, teniendo en cuenta que todos los integrantes están conscientes y aceptan la relación. Aunque se sabe que desde hace siglos el poliamor se ha practicado en algunas regiones del mundo, no fue sino hasta hace unos años cuando este tipo de relación empezó a tener una mayor aceptación social en países donde antes no se concebía, o se veía como algo insólito.

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La historia o el surgimiento de este término no tiene un dato preciso, pero se popularizó en los años 90 con Morning Glory en su artículo “A bouquet of lovers”, y con Jennifer Wesp, con la creación de su foro de noticias por internet llamado alt.polyamory. Después el término dejo de tener relevancia hasta nuestros días.

El poliamor no es una orgía o un intercambio de parejas, ni es poligamia, pues no necesariamente conlleva a una relación matrimonial y, aunque muchos no lo crean, tampoco es una forma de evitar responsabilidades con otros, pues el simple hecho de estar en esta situación te hace comprometerte a los lineamientos que se requieren.

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Puntos clave para tener una relación de poliamor

Una persona que decida adoptar este tipo de relación debe tener en cuenta lo siguiente:

• Aceptar que se puede amar a más de una persona a la vez.
• Olvidar el qué dirán. En la sociedad apenas se está aceptando este tipo de amor, así que no te preocupes si de repente sientes que todos te observan.
• No es una relación abierta, donde cada quien anda con quien sea sin que lo sepa su primera pareja; la comunicación es básica, así se evitarán celos y malentendidos.
• Cada uno de los integrantes requiere de un tiempo de convivencia, y para respetarlos es primordial llegar a acuerdos.
• Conocer los límites, es decir, todos tienen el mismo estatus dentro de la relación, o existe quien es tu pareja principal.
• Respetar los sentimientos de todos los integrantes de la relación.

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Clases de Poliamor

Si eres de los chavos de mente abierta, a los que no les gusta la esclavitud ni un compromiso con alguien más que no sean ustedes mismos (tampoco se trata de ser egoístas), esa es una razón por la que te encantará el poliamor; por lo tanto, debes saber cuántos tipos hay y cuál se acomoda a tu estilo de vida; con el fin de que sea algo placentero y no complicado como tu estado sentimental de Facebook.

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Aquí te presento algunos:

• Polifidelidad: En este tipo de poliamor sólo se debe tener contacto y relación con el número de personas que integren el grupo, es decir, algo así como los tres mosqueteros: “uno para todos y todos para uno”.  Si quieres agregar a alguien más al grupo, todos los integrantes deberán estar de acuerdo.
• Relaciones jerárquicas: Como se expresa, se refiere a la antigüedad de las personas dentro del grupo, y por consiguiente la que tenga más es la que tiene mayor peso en las decisiones.
• Poligamia: Es, sin duda, la más conocida; pero aquí uno es el rey o la reina; debido a que una persona se casa o tiene un sinfín de parejas legal o ilegalmente.
• Relaciones mono-poliamorosas: Esta es de las más raras, porque uno de los integrantes es leal con su pareja, pero acepta que su pareja tenga más relaciones externas. Es como algo voyerista ¿no creen?

¿Y tú estás preparado para el poliamor? Y si no y prefieres algo más intenso en pareja, te recomiendo…