Conoce Mérida por medio de su comida, descubre sus tradiciones y los platillos que no debes dejar de probar, te decimos dónde comer en Mérida.
Nos dimos una vuelta por las calles de Mérida, de donde te damos algunas opciones de lugares para comer
No hay mejor forma de conocer un destino que por su comida; probar sus platillos típicos, desde el que venden en la calle, como las marquesitas, o sentarte a comer en un restaurante típico, probar un pan o refrescarte con una buena cerveza local. ¡Conoce Mérida por su comida!
No importa qué día del año visites Mérida, el calor hará de las suyas; para que te refresques mientras caminas por las calles del centro te recomendamos un helado artesanal, elaborado con ingredientes mexicanos al estilo europeo. También tienen un local de jugos.
Constantemente cambian sus sabores, así que puedes encontrarte con un helado de pan de muerto, aguacate, frijol con puerco, lavanda con miel y queso de cabra, helado de aceite de oliva con almendra, y de “ascalate” –bebida típica de Chiapas hecha con pinole, achiote y cacao–. Si eres de sabores fuertes, prueba el helado de queso azul con mermelada de manzana casera.
Levántate temprano, que este lugar es muy solicitado por sus tortillas hechas a mano, su estilo de casona antigua llena de colores y artesanías yucatecas, y porque aquí encuentras la comida típica de Yucatán.
Para que se te haga agua la boca, te recomendamos unas empanadas rellenas de cazón entomatado, unos panuchos rellenos de frijol con pavo deshebrado, lechuga, pepino, tomate, cebolla y aguacate. No dejes de probar el brazo de reina: rollo de masa maíz con chaya, relleno de huevo sazonado con pepita de calabaza y cocido al vapor, envuelto en hoja de plátano.
La lista de platillos es enorme, pero no dejes de probar la cochinita, los huevos motuleños, la sopa de lima y el pan de cazón.
La playa se encuentra a sólo 25 minutos de Mérida; estás a sólo 25 minutos de poder enterrar los pies en la arena, tomar el sol para agarrar color y disfrutar de buena comida de mariscos con vista al mar.
Si tienes mucha hambre, prueba los huevos motuleños: dos huevos fritos sobre una tostada cubierta de frijoles refritos, aderezados con salsa de tomate, jamón picado, chícharos, queso manchego y plátanos fritos. Si necesitas recuperarte de una buena noche, el aguachile de tomate, apio, callo redondo, fritura de calamar con alioli de longaniza, puede ser tu opción.
Esta cerveza independiente se produce únicamente en este estado, y se comercializa en tres presentaciones: pilsner, belgian e Ipa. En Hermana República puedes visitar la fábrica, comer rico y probar su gran variedad de cervezas. Hay con tonos de chocolate, vainilla y muchos sabores más.
Este platillo es anhelado, soñado y esperado por todos en Mérida, pues sólo lo venden una vez al año, en noviembre. Lo que lo hace tan especial es la forma en que lo cocinan (como lo hacían los mayas): enterrándolo.
Visitamos la casa de Doña Blanca, en el municipio de Dyztia, quien cocina este platillo desde que tenía 14 años. Paso a paso nos mostró el proceso de elaboración de este tamal. Sobre las hojas se coloca la masa de maíz con frijol y manteca, se le agrega el pollo, cerdo, tomate, epazote y cebolla y se cubre con una salsa roja de achiote y col.
Una vez bien envuelto en las hojas, se quitan las piedras calientes del horno bajo tierra, se apaga el fuego, se colocan los tamales envueltos y se cubre con tierra durante una hora y media, tiempo en que está listo para comer; se recomienda acompañarlo con salsa de habanero.
No tienes que buscarlos, ellos te encontrarán a ti. En muchas calles de Mérida encontrarás pequeños puestos en la calle con el letrero de “Marquesitas”, y si no los ves, el olor te guiará seguramente.
En su elaboración se parecen un poco a las crepas; la masa es parecida, sólo que al momento de cocinarla le ponen queso, la hacen rollito y te entregan en minutos una especie de crepa enrollada con queso encima. Ahora las puedas combinar con otros sabores, como nutella, pero la de queso es la tradicional.