Limantour nueva carta de cocteles mexicanos

33Hay algo que nos embruja de Limantour más allá de los títulos internacionales: la variedad de texturas que imprime a su carta y el viaje sensorial que representa cada coctel.

Un ejemplo de este conjuro se presentó hace algunos meses, cuando Limantour inauguró un nuevo concepto llamado Latin Blend, que se centra en las tradiciones licoreras de nuestro continente.

Ahora, en esta temporada, la nueva carta de Limantour sigue con este paisaje hispanoamericano y hace un homenaje a la cultura mexicana a través de una docena de cocteles cuyo ingrediente principal es un licor destilado en nuestro país.

En esta carta se encuentran tragos –bautizados como obras literarias y poemas mexicanos, desde Juan Rulfo, Jaime Sabines, Laura Esquivel– con whiskey oaxaqueño (elaborado con maíz), mezcal, charanda michoacana, moscos toluqueños (de naranja), pox de Chiapas, ron oaxaqueño, licor de chile ancho de Puebla, curado de guayaba y moonshine.

Y ahora sí, lo más importante: nuestros cocteles favoritos.

El Extraviado (nos voló la cabeza): una especie de piña colada cool: charanda + curado de guayaba + crema de coco + jugo de limón. Una delicia que se ha convertido en uno de nuestros tragos favoritos del año.

El Aprendiz (inspirado en El laberinto de la soledad): mezcal, tepache, limón, jarabe de piloncillo con canela, té de manzanilla y puré de guayaba, servido en un vaso colorido

Los Amorosos (sí, como el poema de Jaime Sabines): moonshine, vermouth, cordial de jamaica, jugo de naranja, un vaso escarchado con cacao y una flor comestible.

Comala (no hace falta decir que es de Juan Rulfo): Ancho Reyes, whiskey y café cold brew.

Chencha (que nace de Como agua para chocolate): pox, aperol, Ancho Reyes, chicha morada y servida en un guaje.

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Arquitectura y fotografía

El diseño del menú está inspirado en la arquitectura y estética del famoso arquitecto Luis Barragán.