Leyendas urbanas de la CDMX, ¿las conoces todas?

No tuviste infancia si no conoces estas conocidas leyendas urbanas de la CDMX. Desde la eterna quejumbrosa “Llorona”, hasta la condenada enfermera “la planchada”.

Además de estar fundada sobre lo que fue un enorme lago, nuestra amada (y a veces odiada) ciudad fue construida sobre mitos y leyendas que por generaciones nos han dado identidad, no solo como citadinos, sino como mexicanos. Desde una mujer que llora amargamente por sus hijos perdidos, la enfermera que hizo caso omiso de su juramento profesional, las almas en pena en un centro comercial y el portal místico a una temible dimensión ¡Aquí las mejores leyendas urbanas de la CDMX!

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¡Conoce algunas de las leyendas urbanas de la CDMX y respira el miedo!

La llorona

Se trata de, quizá, la leyenda más famosa en todo el país. Y claro, en cada familia ‘el primo de un amigo’ la ha escuchado y visto andar en pena por sus hijos, a veces gimiendo sin paz, algunas gritando a los cuatro vientos “¡ay, mis hijos!”.

Hay quienes para hacer verídica esta leyenda aseguran que ‘La llorona’ es el alma en pena de la Malinche, la compañera indígena de Hernán Cortés que le ayudó a interpretar la lengua del imperio azteca y que finalmente fue figura central para que los españoles tomaran el poder de México- Tenochtitlán. Ahora, como condena, recorre las calles, ríos y barrancos de la ciudad (y algunos otros puntos del país) con un terrible llanto por sus hijos, los mexicanos, que perdieron la batalla contra los conquistadores.

También hay otra versión que dice que se trató de una mujer pobre que, al ver que definitivamente no le alcanzaría para mantener a sus hijos después de quedarse viuda (o que el marido la abandonara) asesinó a sus hijos. Su condena: una eternidad para recorrer las calles de la ciudad, testigo silenciosa de su crimen, en la penosa búsqueda de las almas de sus hijos.

La Planchada

Se dice que Eulalia era el nombre de la enfermera que, tras una decepción amorosa, dejó de atender a sus pacientes, quienes murieron a consecuencia del olvido de esta mujer que solía siempre estar impecablemente bien vestida y con un uniforme con planchado excelente. Al morir, se dice que su alma fue condenada a vagar por los hospitales para brindar consuelo y paz a los enfermos. Se dice que, generalmente aparece cuando estos están por ser dados de alta por la mejoría en su salud.

Una enfermera del Centro Médico Nacional, severamente dañado tras los sismos de septiembre de 1985, dice que por las noches tras terminar sus rondas, muchas de sus compañeras han caído en sueño profundo y son despertadas porque alguien -o algo- las toca o incluso les da un zape. Por esta razón se cree que puede tratarse de una de las tantas enfermeras que murieron bajo los escombros del hospital.

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Apariciones en Parque Delta

Ya que tocamos el tema de los sismos de 1985, muchos de los cuerpos rescatados de entre los escombros fueron a dar a un anfiteatro improvisado sobre la cancha de baseball del Parque Delta.

La gente de sus alrededores, antes, durante y después de la construcción del nuevo centro comercial que hoy ocupa esos terrenos dice que a veces, por las noches, puede oírse el llanto de personas. Algunos aseguran que se trata del alma de las personas que no pudieron ser reconocidas y bajo ese estatus fueron a dar a la fosa común.

Incluso, se dice que dentro del centro comercial se llegan a ver sombras, personas y ‘cosas raras’ por las noches.

El Callejón del Aguacate

El colonial centro de Coyoacán no podía salvarse de ser el foco de una leyenda, quizá una de las más temibles pues el personaje principal es el mismísimo ‘príncipe de las tinieblas’, Satanás; quien habita en esta suerte de portal místico al acecho de las almas de los pobres incautos y curiosos que vagan por el lugar, especialmente por las noches. Se dice que hasta al más valiente se ha hecho pipí sobre sí al tratar de experimentar lo que cuentan que se vive ahí.

Sin embargo, la leyenda se ha tergiversado al paso de los años, pues también se habla de la presencia de fantasmas que acosan a quien andar por ahí o escándalo que se oye en una casa abandonada en la que aseguran que se jugó la ouija y de los participantes nada se volvió a saber. Sin embargo, reina una historia de la terrible muerte de un niño en manos de un coronel… sea cual sea, pesa el ambiente al pasar por ahí.

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Km 31 de la autopista México-Toluca

Hay varias versiones sobre esta leyenda pero todas coinciden con un fatídico final con accidentes terribles, a veces fuertes golpes y contusiones, y muchas otras con terribles muertes. La razón: una aparición en la carretera, justo en el Km 31 de la México-Toluca a la altura del ex-convento del Desierto de los Leones.

La gente cuenta que durante la construcción de esta carretera en su etapa primigenia, es decir, el antiguo camino, varios de los constructores fueron brutal y misteriosamente asesinados, desde entonces, sus almas aparecen de vez en vez en la zona y justo son ellas las que salen de la nada sobre el camino y causan los accidentes.

También se dice que han visto monjes vagando por el camino, lo cual suena lógico, pues el ex-convento se encuentra cerca. Así que ahora ya lo sabes cuando viajes por la zona, especialmente si es de noche.

¿Te dio miedo? ¿Conoces alguna otra leyenda de la CDMX que no contemplamos? Cuéntanos en nuestras redes sociales o en la sección de comentarios que se encuentra aquí debajo.