Dulces retro que todo niño mexicano comió ¡y seguimos recordando!

Estos dulces retro que todo niño mexicano comió alguna vez nos invitan a realizar un viaje por la nostalgia de las décadas de los 60s, 70s, 80s, 90s y 2000. ¡Cómo no recordar los buenos momentos que pasamos saboreando estas dulces maravillas!

Fueran los chicles en el recreo, los chocolates para el amigo secreto, las paletas entre clases o la botana para ver la tele en las tardes estos dulces retro eran los más geniales del momento. ¡Dicen que recordar es volver a vivir y que mejor momento que el Día del Niño y la Niña para volver a esos grandes momentos de la infancia!

Estos son los dulces retro que todo mexicano sigue recordando:

1) Chocolate Presidente y Carlos V

Foto: Cortesía Página Looking Back

Chocolate Presidente fabricado por la desparecida dulcera La Azteca fue el consentido de los pequeños setenteros; así como el Carlos V en su versión retro y chocolatosa. Las tres caritas sonrientes de los pequeños en el empaque de Chocolate Presidente son la publicidad perfecta para la emoción que provocaba comer a escondidas varias tabletas de este sabroso chocolate.

2) Tootsie Roll y Selz Soda

Foto: Cortesía Wikipedia

El famoso Tootsie Roll es el caramelo masticable más popular. Elaborado por un dulcero austriaco en Nueva York a principios del siglo XX ha recorrido múltiples generaciones. Los Tootsie Roll han sido responsables de múltiples caries por su dulce sabor adictivo y por estar contenidos en la famosísima Tutsibota Navideña.

Las Selz Soda son inolvidables por su sabor carbonatado, las cosquillas en la lengua al chuparlos y su vistoso empaque naranja. Con más de cincuenta años en el mercado siguen siendo producidas por la industria Dulcera Mexicana.

3) Sweet Tarts

Foto: Cortesía Pinterest Remember

Los dulces estadounidenses fueron muy populares en México. De contrabando, por los tíos que venían de visita o en el mercado de la colonia se podían encontrar estas pastillas de colores aciditas que escaldaban hasta la lengua más resistente.

4) Pale-Locas

Foto: Cortesía Amazon

Nada como tener dos paletitas en una. Este divertido caramelo tenía dos caritas a cada extremo con simpáticas muecas. ¿Dulce, agridulce o ácido? Algo diferente en cada experiencia por Dulces Luxus.

5) Lunetas Duval

Con su famoso eslogan “Llégale al corazón. Si no son DUVAL no son lunetas” eran la opción perfecta para regalar a ese amor secreto de la primaria. Sus divertidos colores amarillo, verde, rojo nos hacen pensar que ya no las hacen como antes.

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6) Chamoy Miguelito

El mejor sabor de Chamoy Miguelito se fundó en los setentas por Felipe Zúñiga Chávez, quien colaboró con la familia Iwadare de origen japonés. La mezcla de sabores orientales y mexicanos creó la famosa receta de este polvito con chile y limón en sus distintas presentaciones.

7) Pizzerolas

Su original forma circular, su peculiar sabor y su empaque con transparencias hicieron de esta botana la mejor para disfrutar con amigos en el parque o disfrutando de la barra de televisión después de la escuela.

8) Brinquitos, Limón 7 y Dragonzitos

Foto: Cortesía Dulcelestes.mx

Estos tres dulces son representativos por hacernos pegar chistosas caras cuando los tomábamos. El polvito acidulado en diferentes presentaciones en pequeñas bolsitas de colores y el Limón 7 en empaque de plástico verde marcaron el gusto de varias generaciones.

9) Chicles Motitas y Bubli Bubli

Los famosísimos chicles Motitas marcaron toda una generación que aún recuerda su delicioso sabor a plátano, uva y frutas. Los Bubli Bubli fueron geniales para realizar competencias de las más grandes bombas de chicle o para romperlas con tu primer novio o novia en la secundaria.

10) Muppaletas, Raspatito y Vampiro

Estas tres opciones congeladas de Helados Holanda fueron las favoritas de los niños mexicanos. El Tío Gamboín anunciaba con entusiasmo el álbum de los Muppets patrocinado por las Muppaletas; los Raspatito y su forma en triangulito eran el rapado más refrescante y las paletas vampiro tenían un representativo color morado que la hacía única.

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11) Gansito Marinela

Foto: Cortesía Animal Gourmet

Fue creado en 1957 y desde entonces ha sido el pastelito más comido en México. Su suave consistencia de pan de chocolate relleno con crema y mermelada de fresa son clásicas, mientras su empaque ha cambiado a lo largo de las generaciones.

12) Caja Sonric’s

Foto: Cortesía San Diego Red

Esta Caja Sonric’s era el sueño de cualquier niño de los noventas por la sorpresa que contenía en su interior: desde los personajes de Looney Tunes, las Chicas Superpoderosas y hasta Britney Spears en figuras coleccionables. Apenas unos pocos chicles y las coquetas paletas de colores Gudu Pops completaban la dulce experiencia.

13) Piedrulces, Sugus y Winis

Los Piedrulces en su clásica cajita roja, con las caritas de los famosísimos Picapiedra, era identificable a metros de distancia del puesto de dulces. Su sabor acidito, su económica presentación y su utilidad como proyectil lanzado desde un popote lo hacían el dulce ideal para pasar momentos de diversión.

Fotos: Cortesía El Fonógrafo

Los Sugus y sus descendientes los Winis siempre te eran compensados por tu vendedor de dulces de confianza cuando le faltaba cambio para completarte. Un agridulce sabor te quedaba al saborearlos recién salidos de sus empaques de colores.

14) Ring Pop, Push Pop y Paletas Alien

Foto: Cortesía Amazon

Estas paletas norteamericanas fueron la sensación a inicios de los 2000. La coqueta presentación de diamante de Ring Pop lo hacían muy atractivo; que decir del Push Pop de mora o sandía listo para saborearse y las Paletas Alien, con su discutida toxicidad, que tenían un palito que brillaba en la oscuridad. ¡Divertidos y curiosos!

15) Pop Rocks y Crazy Dips

Foto: Cortesía Amazon

Estas explosivas golosinas eran una experiencia inexplicable. Cuando entraban en contacto con tu boca comenzaban a brincar. Desde los Pop Rocks en sobrecito hasta las Crazy Dips que incluían una paleta de piecito, estos dulces brindaban momentos inigualables de diversión.

¿Cuáles otros dulces retro recuerdas? ¿Cuáles marcaron tu infancia? Platicar con abuelos y padres sobre sus dulces favoritos es una increíble forma de rememorar tiempos pasados en familia.