De la mente maestra de Edo Kobayashi, surge un nuevo restaurante de comida chuka en la CDMX, te damos los detalles de Lazy Susan
De la mente maestra de Edo Kobayashi, surge Lazy Susan, un nuevo restaurante de comida chuka en la CDMX, ¡ya fuimos y esto es lo que pasó!
Hay un pequeño pedazo de Asia en la CDMX. En las entrañas del Little Tokyo de la Cuauhtémoc, justo enfrente del Tokyo Music Bar, se encuentra Lazy Susan.
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El concepto de Lazy Susan es la comida chuka, cuyo origen se remonta a mediados del siglo XIX, cuando el puerto de Yokohama, Japón, se abrió al comercio exterior y comenzó a recibir a migrantes chinos que formaron algunos asentamientos.
Cuando los chinos se establecieron dieron forma al barrio chino más grande de Japón. La unión de las culturas japonesa y china floreció cuando los migrantes chinos adaptaron su gastronomía a la cultura local. En esas primeras cocinas, la comida china se mezcló con el estilo de preparación japonés para crear nuevos sabores y, principalmente, nuevas formas de elaborar los platillos tradicionales. Esta es la premisa de cocina de Lazy Susan.
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En el menú de Lazy Susan encontrarás platillos orientales únicos elaborados con insumos frescos importados directamente de China, preparados al estilo japonés y con los sellos de Edo Kobayashi: rigor en la técnica, la más alta calidad de ingredientes y atención al más mínimo detalle. En Lazy Susan los platillos están a cargo de Shigetoshi “Toshi” Narita, uno de los colaboradores más antiguos de Kobayashi.
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Te presentamos nuestros platillos favoritos:
Puedes ver el menú completo en el sitio de lazysusan.mx
En cuanto a las bebidas, tienen una amplia variedades de sake que maridan con toda la carta, desde secos, fermentados, con acentos lácticos o de madera, y hasta de especias y herbales.
También cuentan con cervezas chinas como la Tsingtao y la japonesa Kirin Ichiban.
En cuanto a la coctelería, ofrecen tragos refrescantes que se crearon en la década de los 50, pero que se hicieron famosos en los 80 y 90. Como el Miami Vice, que lleva piña colada y daiquirí de fresa; el toque especial se lo da la pimienta Sichuan y un preparado de fresa quemada fermentado por casi 300 días.
Destaca también el Long Island Iced Tea, elaborado con un escarchado de ron, tequila, gin, vodka y licor de naranja, pero que incluye hoja de neroli y de naranja aromática.